Nuestros hogares deberían ser nuestros santuarios, un retiro del ajetreo y el bullicio de la vida cotidiana. Pero es posible que al llegar a casa, el diseño de interiores no este configurado para relajarse. En este post proponemos 3 consejos para que nuestro hogar nos aporte esa calma tan necesaria.
1. Usa una paleta de colores relajantes
Intenta diseñar tu hogar alrededor de colores relajantes como verdes, azules y lavandas así como blancos y tonos neutros más cálidos. “Los defensores de la psicología del color creen que los colores que usamos para decorar nuestra casa pueden tener un profundo efecto en el bienestar emocional de quienes viven en ella”. Por ejemplo, el color azul podría reducir el ritmo cardíaco y la presión arterial, lo que proporciona directamente una mayor sensación de calma. Podemos incorporar los colores en elementos textiles, alfombras vinílicas o pintando las paredes.
Pero sobretodo la paleta de colores de casa debe gustarnos. No configures todo de un verde pálido solo porque se supone que te va a relajar ya que, si lo odias, probablemente conseguirás el efecto contrario.
2. Agrega plantas de interior
Agregar plantas al diseño de interiores tiene una función más allá de embellecer. Además de ser filtros de aire y humidificadores naturales , múltiples estudios han demostrado que estar cerca de las plantas tiene un efecto calmante en las personas. Un estudio sugiere que “la interacción activa con plantas de interior puede reducir el estrés fisiológico y psicológico” después de personas que trabajaban con plantas en interiores afirmaron sentirse “más cómodos y aliviados”. Siempre que las plantas de interior no generen alergias para ninguno de los miembros de la familia, estas actuarán como un calmante natural.