Mezclar texturas es algo visualmente enriquecedor en múltiples disciplinas y el diseño de interiores no es una excepción.
En este artículo queremos hablaros de los materiales que son tendencia este año y que aportaran un toque exclusivo a la decoración de su casa.
Mármol
El mármol es un material imprescindible en cualquier hogar que quiera calificarse de moderno y hay una muy buena razón para ello. Se trata de un material clásico que se utiliza desde hace siglos, lo que lo convierte en una opción atemporal y siempre de moda, ideal para el diseño de interiores. Además, las estrías que se forman en la piedra hacen de cada pieza algo único.
En la cocina, las encimeras de mármol son una opción elegante a la vez que altamente funcional, pero no debe limitarse a la cocina. Un jarrón de mármol, un sujetalibros o una mesa de café de este material pueden aportar ese punto de lujo sutil que tiene la capacidad de refinar el ambiente.
Cobre
Un tacto metálico cálido aporta confortabilidad y luz a la decoración de su hogar por eso una de las tendencias principales de este año es el cobre. Un elemento de iluminación colgante de este material, por ejemplo, es una forma silenciosa de añadir categoría a cualquier habitación siendo un recurso menos llamativo que emplear plata u oro.
Además, el cobre también sirve para dar el toque perfecto cuando se combinan diferentes metales.
Madera reciclada
Este material reciclado es ideal para cualquier espacio moderno y encima es ecológico. Es habitual encontrarlo en suelos, vigas y techos pero también se puede emplear en mobiliario para añadir elementos naturales al diseño. Hay que tener en cuenta que la madera recuperada no tiene porqué ser rústica: combinarla con el hierro forjado u otros metales ofrece una sensación de modernidad y, empleando técnicas como el blanqueamiento de maderas en mal estado, se puede conseguir una frescura entre informal y elegante.
Piel
La piel es la forma más fácil de añadir lujo y comodidad a un hogar. Desde alfombras o almohadas pasando por cortinas y colchas, el uso de piel es una tendencia en alza.
Una almohada de piel colocada en un sofá o una cama aporta suavidad y confort y una alfombra de piel de felpa aporta bienestar en el contacto con el suelo.