5 formas en las que el arte puede mejorar el diseño de interiores

Ya sea en forma de pintura, fotocuadro, vinilo o reproducción fotográfica, las obras de arte visuales pueden reunir las condiciones para ser el punto focal de un espacio, añadir color, armonizar, etc.
Invertir en arte para nuestro hogar puede ayudarnos a pensar de manera diferente sobre el mundo que nos rodea. Las buenas obras de arte pueden transformar cualquier ambiente en algo espectacular.
Aquí os mostramos 5 ejemplos de cómo eso sucede.
 

 

Los cuadros pueden utilizarse para dotar movimiento una habitación. El movimiento se utiliza en el mundo del arte para de dirigir la mirada del espectador e influir en su percepción. El uso de una obra de arte que transmite una gran cantidad de movimiento puede ayudar a crear un ritmo entre el arte y el mobiliario, generando una historia conjunta.
 

 

Una obra de arte puede ser utilizada para dictar o mejorar una paleta de colores. Si no sabemos cómo continuar con la decoración, una buena solución es seleccionar una obra de arte que se ajuste al espacio y crear una paleta de colores a partir de esta.
Recomendamos emplear los colores destacados de la obra para objetos decorativos y los secundarios para mejorar diferentes elementos de la habitación.
 

 

Si tenemos techos altos pero preferimos muebles modernos -normalmente bajos- una pintura puede ayudar a atraer la mirada hacia arriba y a hacer que la habitación parezca más equilibrada.
Además, la textura de una obra de arte puede ser útil en la construcción de un diseño más dinámico.
 

 

Si nos aburre un ambiente y necesitamos cambiar algo, sustituir el arte de pared puede ser una manera rápida y fácil de traer una nueva perspectiva.
 

 

El arte no siempre tiene que ser el punto focal de una habitación. Mientras que las ilustraciones se pueden utilizar para influir en una paleta de diseño o color y fijar un diseño de interiores determinado, también se pueden utilizar en formas más sutiles para agregar sofisticación.