Ya sea haciendo obras o simplemente añadiendo una alfombra vinílica o tradicional, podemos actualizar el suelo de las habitaciones de nuestra casa y así dar un nuevo aspecto a nuestro hogar.
La tendencia para este año es el uso de patrones como el conocido como espina de pez, un patrón clásico y elegante que puede reproducirse combinando maderas, baldosas o en imagen.
Si los patrones no son para ti, el parqué de madera es una opción que aporta calidez y que nunca pasará de moda, antes nos cansaremos de él y, cuando eso ocurra, podremos fácilmente aplicarle una capa de pintura.
En cuanto a los colores y tonalidades, los crudos, naturales y de apariencia basta seguirán reinando. Mucha gente se pregunta ¿Es necesario que el suelo de las distintas habitaciones de mi casa coincida? Eso es algo que va a gustos, aunque la respuesta es no. Cada espacio tiene una función y por lo tanto un estilo acorde. Puede que al recibidor le quede bien un tono de madera oscuro mientras que apostemos por un diseño divertido en el cuarto de los niños con una alfombra vinílica infantil. La transición entre espacios la podemos realizar mediante distintos objetos de decoración.
Los suelos de madera que están teñidos de colores son tendencia. La madera teñida de azul, por ejemplo, puede agregar una sutil alegría a los pasillos.
Las tendencias sirven para inspirar, guiar y estimular la actualización del diseño de interiores de nuestro hogar. Intentar seguirlas todas sería un ejercicio que requeriría una inversión en tiempo y dinero elevadísima y que tendría como resultado una mezcla extraña y sin criterio.
Al final se trata de poder dar a nuestra decoración un aspecto personalizado y jugar con aquellas tendencias que mejor concuerden con nuestro carácter para diseñar espacios en los que estar lo más a gusto posible.