¿Qué son los PhotoDoors?

Existe una manera de transformar las aburridas puertas de nuestra casa y darles un aspecto personalizado según la habitación en la que se encuentren. Hablamos de los llamados Photodoor, unos vinilos para puertas autoadhesivos disponibles en una amplia variedad de diseños y colores e impresos en calidad fotográfica.
Además de ser un elemento de decoración también sirven para proteger las puertas de pequeños golpes y rozaduras, y su fácil aplicación los hacen ideales para aportar un toque novedoso a cualquier diseño de interiores de forma rápida y llamativa.
Hoy os traemos algunos consejos a tener en cuenta por si optamos por los Photodoors como opción decorativa para nuestro hogar.
 
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Elegid un diseño que complemente vuestro diseño de interiores

Los vinilos para puerta están disponibles en una amplia gama de diseños diferentes, incluyendo fotografías de paisajes, texturas, ilustraciones, patrones,… fabricados a medida con el fin de adaptarse a la perfección a la superficie de la puerta.
Al escoger un diseño es importante tener en cuenta el esquema de color del resto de la habitación.
Si se quiere usar un PhotoDoor para la habitación de un niño recomendamos elegir un diseño llamativo y divertido.
Finalmente, y antes de comprar, es fundamental medir la puerta para de escoger aquel diseño que proporcione un ajuste perfecto.
 
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Instalación

La aplicación del vinilo sobre a la superficie de la puerta es sencilla aunque todo es más fácil con la ayuda de un familiar o amigo, sobre todo si el vinilo es particularmente grande.
Empezaremos limpiando la puerta, asegurándonos de que queda libre de polvo y suciedad, y que está completamente lisa y seca. No importa el material de la puerta ya que los PhotoDoors son capaces de pegarse a casi todas las superficies.
Una vez retirado el pomo de la puerta, extenderemos el vinilo sobre el suelo y retiraremos el papel.
Empezaremos colocándolo por una esquina y, poco a poco, iremos fijándolo con un objeto liso para retirar el aire y que no se formen burbujas. En el caso de que se formaran, estas pueden hacerse desparecer fácilmente ejerciendo presión sobre ellas.
Finalmente volveremos a colocar el pomo y podremos empezar a disfrutar del nuevo aspecto de nuestra puerta.
 
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